¿Mucho o poco? La falta de inventario puede causarte problemas para satisfacer la demanda, pero el exceso de inventario también tiene sus escollos.
Por ejemplo, la mercancía que casi no se vende en ciertas temporadas, le quita espacio a otros artículos más cotizados. También es un problema para ordenar o controlar el movimiento de productos. Además, el almacenamiento prolongado puede reducir la calidad de los activos.
Este es un contratiempo en el que podemos ayudarte, para que crezcas y le ofrezcas un mejor servicio a tus clientes. Por eso, hoy queremos compartirte los problemas de mantener el stock por mucho tiempo, junto con algunas soluciones para prevenir estos estanques.
Contra el sobre–stock
Al exceso de inventario también se le llama “sobre-stock”, y generalmente sucede por esos productos que tienen muy baja rotación… o nula. Es un problema que crece lentamente; no eres el único que lo enfrenta.
Los efectos de la recesión han afectado a la mayoría de los sectores económicos. Ese fenómeno ha demostrado que, si los inventarios no tienen una circulación fluida y constante, desequilibran las finanzas del negocio.
Por lo tanto, acumular producto en nuestros almacenes conlleva una serie de costos, que, dependiendo de su magnitud, pueden resultar contraproducentes a los esfuerzos de la cadena de suministro:
1- Costos financieros. Desde el punto de vista del fondo de maniobra, las pérdidas económicas se resumen en cese del rendimiento, porque no se destina el capital del stock estancado en inversiones más productivas.
2- Costos logísticos. Precios de mantenimiento, almacenaje y manipulación interna más elevados, sin mencionar las horas invertidas que los equipos logísticos invierten en estas actividades.
3- Obsolescencia. La circulación de algunos artículos disminuye total o parcialmente, por la depreciación en el mercado. Esos artículos obsoletos son pérdidas para el negocio en el año de la depreciación, forzándolo a establecer provisiones manuales cada año, para evitar pérdidas imprevistas.
4- Desabastecimiento. El exceso de inventario genera disfuncionalidad en el stock total de la empresa. ¿Por qué? Pues existen artículos de los que tienes un valor excesivo, y eso genera que no se pueda mantener el stock suficiente de otros más necesarios.
5- Menos ganancias. Muchas veces, los excesos tienen que liquidarse con ofertas: venta por un costo menor para recuperar un poco de la inversión… a veces con precios por debajo del valor original.
6- Costos de almacenamiento. Muchas empresas cuentan con espacio adicional en almacén, para mantener ahí el exceso de inventario, hasta que el producto se moviliza. Pero mientras más espacio le dediques al almacenamiento, tendrás menos espacio para vender.
7- Desperdicios. Terminas por eliminar el exceso de inventario que vence o se deteriora. Por ejemplo, un negocio de alimentos necesita descartar la comida que no se consume y se descompone. Eso es crítico para controlar sus costos y mantener la rentabilidad.
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Cómo mantener el nivel mínimo
El buen manejo del stock depende de la empresa y su sector, pero siempre se debe buscar el escenario ideal para que los niveles de inventario permanezcan con los valores adecuados. Puedes utilizar las siguientes ideas para lograrlo:
1) Crear un sistema de valoración del exceso de inventario que ofrezca una valoración periódica de la cantidad y el valor del exceso, por Unidad de Mantenimiento en Almacén y por la línea de negocio. El informe debe contener todos los detalles necesarios para entender la magnitud del problema.
2) Elaborar objetivos anuales por líneas de negocio (si tuvieras más de una), considerando circunstancias del producto, compras en el extranjero, la evaluación de stocks de seguridad, ciclos de vida de producto y lotes de compra.
3) Sistema de clasificación de artículos para gestionar los productos que puedan tener mayor probabilidad de generar exceso de inventario.
4) Coordinación eficaz con los departamentos implicados en la adquisición y venta, para así detectar los posibles excesos de inventario a tiempo, y establecer canales de comunicación con otras áreas del negocio para encontrar soluciones al estanque.
5) Sistema de Planificación de la Demanda. Contar con un software avanzado de cálculo de necesidades de aprovisionamiento (como un Demand Planning System) que nos permita buscar el equilibrio entre el stock y el nivel de servicio: qué pedir, cuánto pedir y cuándo pedir.
Para optimizar lo anterior y evitar inconvenientes, hay que contar con la disponibilidad del producto. Cada línea de pedido solicitada necesita entregarse en ese mismo momento, sin recurrir a reposiciones.
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