Tesla Motors diseña vehículos eléctricos, con precios de venta económicos, desde 2004. Desde entonces, han creado propuestas como Roadster –ideado para competir con un Porsche o Ferrari–, así como los modelos X y S.
En 2017, la compañía desveló Tesla Semi. Puede acelerar de 0 a 97 kilómetros por hora en 20 segundos, cuando carga 36 mil 287 kilos. Eso es más del doble que un camión diésel. Además, sus dos motores eléctricos tienen una garantía de 1 millón 609 mil 377 kilómetros.
Las primeras entregas de Tesla Semi se realizarán en 2019. Actualmente, Wal-Mart reservó 45 camiones eléctricos; DHL 10; FedEx 20; PepsiCo 100 y UPS 125. Como ves, el uso de transporte eléctrico ya está por transformar el futuro de la logística.
Contexto
La viabilidad del transporte eléctrico tiene dos incentivos: la diferencia de costos entre los Kilowatts necesarios para cargar los vehículos, y los crecientes precios del Diésel; así como las ventajas medioambientales.
Actualmente, los combustibles fósiles ya están demostrando sus desventajas: escasez del recurso, lluvias ácidas y cambio climático. Por eso la importancia de utilizar vehículos que cuiden el ecosistema.
Pros y contras
Las ventajas del transporte eléctrico son las siguientes:
- Los motores son menos costosos, más compactos y sencillos en su fabricación y mantenimiento.
- No emite calor excesivo y su ruido es mínimo. Eso previene que los conductores sufran altas temperaturas o vibraciones que sólo aumentan el estrés en un largo viaje.
- No necesitan aceites de motor ni anticongelantes. Todo eso disminuye la huella de carbono.
- Pueden usar regeneración de baterías y contar con frenado regenerativo (sistema que transforma la energía cinética en carga para las baterías).
Eso sí, un transporte eléctrico tampoco está exento de contratiempos:
- Baterías y durabilidad. El ingeniero líder de los autos híbridos y eléctricos de Lotus estima que la relación sería: 6 kilogramos de diésel por cada 200 kilos de baterías. Además, su ciclo de vida puede variar entre 7 años o 100 mil kilómetros.
- Su precio todavía es muy alto, por lo que se requiere mejorar la tecnología para fabricarlos y adaptarlos para su uso cotidiano.
Solución de valor
Renault estima que 20 % de los vehículos usados en 2020 serán eléctricos. Por supuesto, la industria automotriz está empeñada en aprovechar esta nueva revolución del camino. En la logística, el transporte eléctrico puede ser crucial para atender los servicios “de última milla”; es decir, las entregas finales, en las localidades donde viven los clientes.
Esta es una etapa decisiva para los negocios, y es cada vez más difícil de lograr. El eCommerce ha provocado que los consumidores ordenen más productos; esperan recibirlos en el menor tiempo posible, ya sea en la tienda o en sus propias casas.
Es cada vez más necesario contar con una flotilla de transportes lista para transportar la mercancía; eso genera tráfico, contaminación, fatiga y estrés. Por eso, el transporte de mercancía necesita soluciones sostenibles, con las que puedan ofrecer un mejor servicio en las ciudades.
Los vehículos eléctricos resuelven los problemas antes mencionados y son una alternativa estratégica para la logística urbana, por sus ventajas de costos frente al combustible y sus beneficios ambientales.
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