La industria 4.0 ya está cambiando las prácticas tradicionales de la cadena de suministro. Un buen ejemplo es el uso de las etiquetas RFID (identificación por radiofrecuencia). Éstas transmiten la “identidad” de un objeto, por medio de ondas radiofónicas.
Así, la tecnología RFID permite registrar control de inventarios, accesos y vehículos; movimiento de mercancía, almacenamiento, trazabilidad; o control y automatización de procesos.
Definición y beneficios
Su funcionamiento es muy sencillo: sólo se trata de un dispositivo de radiofrecuencia que se comunica con una etiqueta. Ésta contiene un chip que permite su rastreo y lectura remota. Eso reduce el escaneo manual del inventario, y reduce la omisión de productos.
La clave del RFID está en la flexibilidad que ofrece para gestionar el inventario. Esto lo hace un medio excelente para la cadena de suministro, pues brinda los siguientes beneficios:
- Optimiza el negocio, al dar información exacta sobre el estado del inventario.
- Incrementa la productividad y el rendimiento de los recursos.
- Reduce costos y el ciclo de pedidos, lo que permite pautar precios más bajos y competitivos.
- Mejora y facilita el servicio de atención al cliente.
RFID en la cadena de suministro
Las etiquetas RFID pueden proporcionar información en el tiempo real. Rastrean y registran datos en cada uno de los tiempos del inventario, agilizando la toma de decisiones en el negocio. También acelera las tareas de recepción, carga y expedición de los productos. Pero eso no es todo, otras ventajas del RFID son las siguientes:
- Recepción, pues elimina procesos duraderos y costosos; agiliza la liquidación de infraestructura; e incrementa la exactitud del inventario.
- Clasificación, pues le da precisión y rapidez para colocarla en los puntos de venta. También previene los envíos erróneos e incorrectos, así como las secuencias de pedidos sin precisión.
- Almacenamiento y preparación, ya que identifica y ubica los productos más rápido, expone avisos ante acciones incorrectas y luego realiza una validación libre de errores.
4. Administración y gestión, porque facilita el recuento cíclico del inventario, con precisión: renueva los pedidos en automático; u facilita la optimización del espacio para reducir costos.
5. Envíos, porque garantiza una preparación más ágil y precisa; minimizando los tiempos de entrega.
6. Gestión y administración, pues te permite ubicar (o actualizar) los equipos en la planta de servicio para establecer referencias rápidas de los productos.
La tecnología RFID permite el acceso a datos y análisis en el momento justo. Eso genera más productividad y rentabilidad, pues optimiza la cadena de suministro y facilita la toma de decisiones.
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